jueves, 31 de julio de 2014

ELKARRIZKETA

ARRANKUDIAGAKO KOFRADIAKOEI

Nork ez du entzun inoiz zeozer Kofradiako bazkaria dela eta? Seguruenik, Arrankudiagako auzokide ia gehienen erantzuna baiezkoa izango da. Beste gauza bat da jakitea nortzuk diren eta zer egiten duten Kofradian daudenak, edo zergatik mantentzen duten gure herriko jaietan hain errotuta dagoen ohitura hau. Gu kofradeetako batzuekin egon gara, eta beste batzuei datuak eskatu dizkiegu, zaila zelako kofrade guztiak elkartzea. Baina batzuk eta besteek esan digutenez, garrantzitsuena da Kofradiaren ezaugarri nagusiak izan diren lankidetzari eta lagunartekotasunari eustea. Guk egindako galderei emandako erantzunekin herriko jendeak Kofradia eta kofradeak hobeto ezagutzea lortu nahi izan dugu. Espero dugu hala izatea. 

Para empezar ¿podéis contarnos cuando surge la Cofradía y por qué? 
Desconocemos la fecha o momento exacto en que surge la Cofradía. Hasta donde sabemos, podemos decir que es antigua, más antigua aún que la de Laudio. Nosotros retomamos la iniciativa tras el parón “obligatorio” por la dictadura franquista. En lo que sí coincide todo el mundo es en que el objetivo que tenía y tiene la Cofradía es hacer una comida en fiestas que sirva para unir a las vecinas y a los vecinos del pueblo, disfrutar el día juntos y aprovechar para charlar o estar junto a aquellos que normalmente no lo hacemos. Por eso no nos parece bien que desde hace unos años se haya puesto de moda marcar manteles y reservar mesas en plan cuadrillas, la idea es sentarte donde haya sitio libre cuando se llega y al lado del que toque. ¡No creemos que pase nada por no comer un día con los que estamos normalmente! Es más, el objetivo es más bien ese.

¿Cuántos participáis en la Cofradía y quienes sois?  
Esperamos no dejarnos a nadie pero, si la memoria no nos falla, a día de hoy estamos: Máximo, Iturri, Jesus Gorostizaga, Jon Egia, Luis Mari Larizgotia, Pablo Abrisketa, Josu Duandikoetxea, Luis Mari Albizua, Jose Ramón “txori”, Koldo Albizua, Josu Bilbao, Iñaki “Larrabetzu”,  Andoni Gento, Aitor, José Aspiazu y Victor. Aunque tampoco podemos dejar de recordar a Pedro Rodríguez, Isidro, Cosme, Félix, Jesús, Patxi… cofrades ya fallecidos. Así como a otros que lo han sido una serie de años pero que por diferentes razones tuvieron que dejar la Cofradía.

Además de elaborar la comida del día en fiestas ¿realizáis alguna otra actividad durante el año?
Actividad, ninguna más. Nos juntamos un par de veces para, además de charlar entre nosotros, comentar los precios, las compras, materiales… Por cierto, hablando de materiales, para nosotros es obligado mencionar a la gente del txoko de Laudio que todos los años nos dejan las cazuelas, sartenes… así como todo lo que necesitemos. Con total confianza y sin pedir nada a cambio. Nuestra mejor forma de agradecérselo es invitarles a comer y compartir el día con ellos y ellas.

Sopa, garbanzos, guisado y fruta. Lo que podríamos calificar como auténtico menú de invierno servido en agosto y con 35º ¿siempre ha sido este el menú? ¿Os habéis planteado alguna vez cambiarlo, adecuarlo…?
Siempre el mismo menú no ha sido. Sí desde que nosotros estamos en la Cofradía y decidimos este como podríamos haber decidido otro. No hay ni razones históricas, ni tradiciones… Hemos comentado lo que nos planteas, pero no hemos creído conveniente cambiarlo porque pensamos que la mayoría está de acuerdo. Por supuesto que aceptamos ideas o aportaciones, pero esto es lo que hay. También descartamos de manera unánime la sugerencia que se hizo de encargar la comida a una empresa, porque creímos que eso sería la muerte de la Cofradía.  

En la Cofradía todos sois hombres ¿y si alguna mujer os planteara participar como cofrade?
No habría ningún problema. Hombre o mujer, la Cofradía está abierta a toda aquella persona que quiera participar.

Volviendo al día de la Cofradía ¿en que consiste la jornada para vosotros?
Sobre las 6,30 de la mañana, algunos ya están en marcha para preparar los quemadores, butanos… y se comienza a cortar la berza. Para las 8 de la mañana, está completo el servicio de cocina y el resto para antes de las 9 ya comienza a montar y servir las mesas. Pero antes del día, se hacen las compras y la víspera  se ponen los garbanzos en agua. Máximo se encarga de preparar un hamaiketako potente con guisado, buen vino y txakoli. La verdad es que hay un ambiente fabuloso. 

Teniendo en cuenta el menú, el vino, el café, las copas… con los 10 euros que se cobran resultará difícil cubrir gastos ¿Cómo se logra semejante “milagro”?
Lo mantuvimos muchos años a 8 euros, pero al final siempre resultaba deficitario. Lo subimos a 9 euros otra serie de años y ahora está a 10. ¡Pero que nadie piense que con esta cantidad se paga lo que se sirve! A lo sumo, algo más de la mitad y si el ayuntamiento no cubriera lo que falta, no podríamos hacer la comida o tendríamos que cobrar más. Actualmente, no hay problemas, pero ha habido años en los que el ayuntamiento no aportaba nada. Y eso que es un acto de fiestas con casi 300 personas, que hablamos de una cantidad bastante pequeña de dinero y que nadie cobra nada por hacer la comida. También es verdad que hace unos años ya que controlamos más el tema del licor y vino, porque subía mucho el gasto. Ha habido fiestas en las que hemos tenido superávit, pero lo normal es que se tenga que ayudar a cubrir gastos. Además, a todos los costes de comida y bebida hay que sumar luego lo que pagamos a los chavales y chavalas del campamento por servir, recoger y fregar. Preferimos pagarles a ellos, porque luego también es para una actividad con los niños y las niñas del pueblo.

Con tantos años de cofradías, no habrán faltado anécdotas…
Bastantes. Desde la de un grupo de ingleses o escoceses que pasaban por el pueblo y viendo la movida nos preguntaron si les podríamos dar de comer. Por supuesto que se les dio, eso sí, de lo que sobró tras comer los del pueblo. 
Un año en el que todavía hacíamos fuego de leña empezó a jarrear y tuvimos que poner un toldo que estaba hecho un cristo de porquería. Este se inundo y cuando nos cayó encima os podéis imaginar, hasta los calzoncillos nos los dejó negros. 
Otra vez tuvimos que hacer la comida encima del escenario porque no paraba de llover o el año que, por más agua que echábamos y tiempo que pasaban cociendo los garbanzos, no se ablandaban… 
Recordar también el camión de madera de haya que traíamos para hacer los fuegos o los “cañonazos” que pegaban el hormigón o las piedras por el calor. Muchas anécdotas, muchas. 

Para finalizar ¿qué futuro le vaticináis a la Cofradía?
Siendo positivos y a poco que la gente quiera echar un cable, sin duda que tiene futuro. Pero creemos que es importante que se sume gente con ánimo de colaborar.  Nos lo pasamos en grande, todo lo hacemos sin ánimo de lucro y tiene su parte satisfactoria… muy satisfactoria. ¡Si la gente supiera que ambiente y camaradería hay seguro que se apuntaría!

Hau da dena. Eskerrik asko eta ondo pasatu jaietan.

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